Los cachorros normales oyen mucho mejor que nosotros, pero algunos nacen sordos o están genéticamente predispuestos a la sordera. Los dálmatas y los Jack Russell Terrier pueden heredar un trastorno nervioso del oído que provoca sordera.
Los perros que envejecen suelen sufrir pérdida de audición, y algunos se quedan completamente sordos, pero no tendrá que preocuparse por ello durante muchos años. Pero un cachorro puede sufrir pérdida de audición al nacer o a cualquier edad a causa de una infección de oído, ácaros del oído u otitis crónica. La pérdida de audición puede acelerarse por los daños provocados por los ruidos fuertes. Los perros que cazan y están expuestos a disparos durante años y años son más propensos a sufrir daños. Las infecciones crónicas del oído también pueden provocar pérdida de audición.
Un perro normal suele oír los mismos sonidos graves que los humanos, así como frecuencias de hasta 100.000 ciclos por segundo. Las personas sólo pueden oír ondas sonoras de hasta 20.000 ciclos por segundo. Los cachorros que se sobresaltan con facilidad o ignoran los sonidos interesantes pueden sufrir una pérdida auditiva.
Sordera congénita
Los cachorros pueden nacer sordos cuando los nervios del oído no se forman correctamente. La sordera congénita suele estar asociada a patrones de pelaje merle o piebald. Entre las razas más comúnmente afectadas se encuentran el dálmata, el pastor australiano, el viejo pastor inglés, el collie, el pastor de las Shetland y el bull terrier. Los criadores éticos son conscientes de los problemas potenciales y trabajan para eliminar la sordera en estos perros mediante prácticas de cría estrictas.
Es posible que no se dé cuenta inmediatamente de que su cachorro es sordo. Las pruebas de electrodiagnóstico especializadas disponibles en algunas universidades veterinarias pueden determinar el alcance de la pérdida auditiva. La mayoría de los propietarios se dan cuenta de que hay un problema durante el adiestramiento, cuando se ignoran las órdenes de voz o cuando otros ruidos no consiguen llamar la atención del cachorro.
Los perros sordos pueden ladrar menos que otros perros y su voz puede sonar extraña. Con frecuencia desarrollan problemas de comportamiento por su incapacidad para comprender la comunicación humana y porque pueden sobresaltarse o asustarse fácilmente ante lo inesperado. Algunos perros sordos pueden ser capaces de oír las frecuencias de silbidos especiales, o sentir la vibración de un pisotón, y pueden compensarlo lo suficiente para la vida cotidiana.
Los perros con una pérdida auditiva gradual tienden a estar bien siempre que permanezcan en un entorno familiar y seguro. Los exámenes rutinarios con el veterinario y la limpieza de oídos son importantes para adelantarse a posibles problemas de salud. Los perros con pérdida auditiva suponen un reto para muchos propietarios, pero pueden adiestrarse con paciencia para que entiendan las señales manuales en lugar de las órdenes de voz.
Vivir con un cachorro sordo
Los perros no pueden decirnos que tienen problemas de audición y lo compensan prestando más atención con sus otros sentidos. Observan a los dueños y a otras mascotas más de cerca y se guían por su comportamiento para saber que hay alguien en la puerta, por ejemplo. Los cachorros sordos también prestan más atención a las vibraciones y a las corrientes de aire: la brisa que hace una puerta abierta puede indicarles que usted ha llegado a casa del trabajo. Incluso cuando no puedan oír el abrelatas, el «reloj» interno de la mascota les anunciará la hora de la cena.
- Utilice señales visuales en lugar de su voz para comunicarse con su cachorro sordo. Los perros aprenden fácilmente a responder a las señales manuales, al haz de luz de una linterna o a la luz del porche encendida y apagada, para entrar a cenar.
- Un «silbato para perros» que utilice ondas sonoras de alta frecuencia puede seguir siendo detectable para su mascota hipoacúsica incluso cuando ya no pueda oír su voz.
- La vibración de golpear las notas más graves en el piano puede sentirse, incluso cuando su mascota no puede oír – utilice eso como una señal para llamar a su mascota.
- Un collar electrónico que «vibra» funciona muy bien como señal, pero debe utilizarse correctamente y quitárselo a la mascota a diario. Estos collares están disponibles en tiendas de artículos para mascotas y a través de Internet.
- Las mascotas sordas se sobresaltan con más facilidad y, como consecuencia, pueden morder por reflejo. Acérquese siempre a su mascota para que le vea venir y dé un pisotón o alguna otra advertencia antes de acariciarle para evitar que le muerda accidentalmente cuando le sobresalte.
- La sordera también plantea problemas de seguridad. ¿Su perro sordo podrá oír y evitar el tráfico? Supervise las salidas o asegúrese de que el patio cerrado es seguro.
Los cachorros sordos siguen siendo mascotas felices. Cierta pérdida de audición es una parte natural y normal del proceso de envejecimiento. Hacer adaptaciones sencillas para una mascota con problemas de audición no es difícil. Además, es lo que hacemos por nuestros amigos.
