¿Qué le parece a su perro viajar en su coche? Si no tiene miedo y le encantan los viajes por carretera, lo más probable es que se suba. Si, por el contrario, tiene miedo, es posible que forcejee con usted cuando intente ponerlo a salvo dentro del coche y que gima o se porte mal durante todo el trayecto. Aunque se trata de una fobia canina común, puede ser desalentador, distraerle y suponer una forma potencialmente insegura de conducir.
Afortunadamente, la mayoría de las personas pueden ayudar a sus perros a superar este miedo y sentirse cómodos durante los viajes en coche. La clave está en introducir gradualmente a su perro en la experiencia, asociando el coche con buenas experiencias, incluyendo mucho refuerzo positivo.
Diez miedos y fobias comunes de los perros
¿Por qué temen los perros los viajes en coche?
Existen varias razones por las que su perro puede tener miedo a viajar en coche. Lo primero que debe hacer es determinar cuál es la que afecta a su perro para saber qué hacer a continuación.
Malestar en el coche
Al igual que las personas, algunos perros se marean en el coche. Pueden sentir náuseas o incluso vomitar durante los viajes en coche. Si este es el caso de su perro, es posible que esa sensación de malestar y náuseas haya condicionado a su mascota a tener miedo de viajar en coche.
Una sensación desconocida
Los perros que no están acostumbrados a viajar en coche pueden sentirse molestos por la extraña sensación de ir en coche. Los coches suelen tener su propio olor, además del sonido del motor, las vibraciones del suelo y el hecho de verlo todo pasar a gran velocidad. Cualquiera de estas cosas, o todas ellas, pueden suponer una experiencia muy aterradora para su perro.
Experiencias negativas
Algunos perros asocian el coche con experiencias negativas, que pueden convertirse fácilmente en miedo. Por ejemplo, la única vez que muchos perros suben a un coche es para ir al veterinario. Si su perro tiene sentimientos negativos sobre ir al veterinario, esos sentimientos pueden trasladarse a los viajes en coche.
Si adopta un perro de un refugio, aumenta la probabilidad de que haya sufrido experiencias traumáticas que usted desconoce. Es posible que los únicos encuentros del perro con los viajes en coche hayan sido el trayecto hasta el refugio (o hasta un lugar donde fue abandonado) y el viaje en coche hasta su nuevo hogar. Estas experiencias aterradoras también podrían explicar la fobia a los coches.
Del mismo modo, un perro que ha estado involucrado en un accidente de coche o atropellado por un coche puede tener miedos duraderos a los coches en general.
Los 8 mejores asientos y sistemas de retención para perros, probados con perros reales
Pasos siguientes
¿Qué le parece a su perro viajar en su coche? Si no tiene miedo y le encantan los viajes por carretera, lo más probable es que se suba. Si, por el contrario, tiene miedo, es posible que forcejee con usted cuando intente ponerlo a salvo dentro del coche y que gima o se porte mal durante todo el trayecto. Aunque se trata de una fobia canina común, puede ser desalentador, distraerle y suponer una forma potencialmente insegura de conducir.
Afortunadamente, la mayoría de las personas pueden ayudar a sus perros a superar este miedo y sentirse cómodos durante los viajes en coche. La clave está en introducir gradualmente a su perro en la experiencia, asociando el coche con buenas experiencias, incluyendo mucho refuerzo positivo.
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- Una sensación desconocida
Los perros que no están acostumbrados a viajar en coche pueden sentirse molestos por la extraña sensación de ir en coche. Los coches suelen tener su propio olor, además del sonido del motor, las vibraciones del suelo y el hecho de verlo todo pasar a gran velocidad. Cualquiera de estas cosas, o todas ellas, pueden suponer una experiencia muy aterradora para su perro.
Experiencias negativas
Algunos perros asocian el coche con experiencias negativas, que pueden convertirse fácilmente en miedo. Por ejemplo, la única vez que muchos perros suben a un coche es para ir al veterinario. Si su perro tiene sentimientos negativos sobre ir al veterinario, esos sentimientos pueden trasladarse a los viajes en coche.
Si adopta un perro de un refugio, aumenta la probabilidad de que haya sufrido experiencias traumáticas que usted desconoce. Es posible que los únicos encuentros del perro con los viajes en coche hayan sido el trayecto hasta el refugio (o hasta un lugar donde fue abandonado) y el viaje en coche hasta su nuevo hogar. Estas experiencias aterradoras también podrían explicar la fobia a los coches.
Del mismo modo, un perro que ha estado involucrado en un accidente de coche o atropellado por un coche puede tener miedos duraderos a los coches en general.
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