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Diarrea en hurones

Los hurones, al igual que otras mascotas, son desgraciadamente propensos a padecer varias dolencias, y la diarrea es una de las más comunes. La diarrea en hurones puede ser un problema grave, ya que puede causar rápidamente deshidratación, pero a veces es temporal y simplemente el resultado de una indiscreción dietética. Si conoce mejor las causas de la diarrea en hurones, podrá ayudar a prevenirla y mantener más contentos tanto a su hurón como a quien limpia la caja de arena.

Causas de la diarrea en hurones

La diarrea se define como una forma frecuente y líquida de las heces. Hay una variedad de razones por las que un hurón puede desarrollar diarrea y no sólo es un lío que usted debe limpiar (tanto en la caja de arena como en su hurón), sino que puede significar que hay un problema mayor con su hurón. La diarrea suele ser el síntoma de una enfermedad que afecta al tracto intestinal y algunas de estas enfermedades pueden ser muy graves.

Enfermedad infecciosa

Las enfermedades infecciosas son una causa común de diarrea en los hurones, ya sean de naturaleza bacteriana, fúngica o vírica. Una enfermedad llamada enteritis catarral epizoótica, o «enfermedad de la baba verde», es una enfermedad vírica que puede causar diarrea en los hurones más viejos cuando se introduce un hurón nuevo en el hogar. Esto se debe a que los hurones más jóvenes son portadores de este coronavirus. Otra enfermedad que se cree que tiene cierta correlación con las enfermedades bacterianas es la enfermedad inflamatoria intestinal, EII, que puede dar lugar a heces de «alpiste» que contienen partículas de comida sin digerir. Los hurones que padecen esta enfermedad también tienden a perder peso con el tiempo si la EII no se trata. Independientemente de las causas bacterianas, fúngicas o víricas, ¡haga que su hurón sea examinado por un veterinario para recibir el tratamiento adecuado!

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Parásitos intestinales

Diagnosticar a su hurón con parásitos intestinales puede resultar a veces difícil, incluso para su veterinario. Las evaluaciones microscópicas de la materia fecal de su hurón pueden revelar gusanos, protozoos, huevos de parásitos y otras formas de intrusos intestinales. Estos parásitos problemáticos suelen afectar al revestimiento intestinal de su hurón y pueden causar diarrea.

Los coccidios son el tipo de parásito intestinal más común en los hurones. Los coccidios son protozoos microscópicos invisibles a simple vista. Estos parásitos permanecen en el tracto intestinal del hurón y provocan diarrea, así como pérdida de peso y otros síntomas si no se tratan. El diagnóstico de la coccidiosis puede realizarlo su veterinario, que necesitará una o varias muestras de heces para realizar pruebas que permitan detectar este diminuto parásito.

Cambios en la dieta

Si su hurón ingiere un alimento que normalmente no come, puede desarrollar diarrea como consecuencia del cambio dietético. Este tipo de diarrea suele durar poco, pero aún así puede ser preocupante y sucia. Los hurones pueden encontrar comida en el suelo, robar la comida de otra mascota o simplemente conseguir una golosina nueva que puede causarles algo de diarrea. Ciertos alimentos también son más propensos a causar diarrea en los hurones. Los alimentos ricos en grasa o que contienen mucho aceite son propensos a provocar deposiciones blandas, al contrario que los alimentos ricos en fibra o sosos.

Cuerpos extraños

Siempre que un hurón se come un objeto que no debería, ese objeto se considera un cuerpo extraño. Se sabe que los hurones mastican y tragan pequeños objetos por curiosidad. Pequeños objetos de goma y plástico, lazos para el pelo, monedas, tapones para los oídos e incluso bolas de pelo pueden convertirse en cuerpos extraños. Si estos objetos se atascan, también pueden provocar una obstrucción en un hurón, lo que es muy grave. La diarrea, si la obstrucción es incompleta, o la falta de heces en general, síntoma común de una obstrucción completa por un cuerpo extraño, son signos clínicos de obstrucción, ya que estos objetos alteran el tracto digestivo normal. Los hurones también pueden empezar a vomitar, perder el apetito y volverse letárgicos si el cuerpo extraño se atasca o emite toxinas.

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Cáncer

Es una palabra que nadie quiere oír pero, por desgracia, el cáncer es bastante frecuente en los hurones domésticos. El linfoma es un tipo de cáncer que puede causar diarrea ya que puede afectar al tracto digestivo del hurón, pero otros tipos de cáncer también pueden presentar este síntoma.

Estrés

Al igual que en muchas otras especies, si un hurón está estresado puede presentar diarrea. Esto no es infrecuente durante una visita al veterinario, en un transportín durante el traslado o después de que un hurón vaya a un nuevo hogar. Una vez que el hurón se relaja, la diarrea por estrés suele remitir, por lo que si esto ocurre, es un buen indicio de que el estrés era la razón de las heces blandas para empezar.

Tratamiento

Dependiendo del motivo de la diarrea, ésta puede resolverse sin ninguna intervención, o su hurón puede necesitar ayuda veterinaria.

  • Su veterinario puede recetarle medicamentos para tratar los parásitos intestinales, disminuir la inflamación provocada por el cáncer o simplemente ayudar a reafirmar las heces.
  • Si un cuerpo extraño está causando la diarrea, puede ser necesario extirpar quirúrgicamente el objeto si está emitiendo toxinas o se ha quedado atascado en el tracto digestivo de su hurón.
  • La diarrea inducida por la dieta y el estrés suele resolverse ofreciendo a su hurón un alimento básico, sin aditivos, y dándole un poco de tiempo para que se recupere. No obstante, si la diarrea persiste, acuda a su veterinario para que le aconseje.
  • La hidratación es muy importante si su hurón tiene diarrea. Algunos hurones necesitan líquidos intravenosos o subcutáneos del veterinario, mientras que otros se hidratan solos si se les proporciona agua fresca en un cuenco.
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Cómo prevenir la diarrea

Mantener sano a su hurón es clave para prevenir la diarrea:

  • Lávese las manos después de manipular hurones que no sean suyos y antes de manipular sus propios hurones.
  • Mantenga al día las vacunas de su hurón.
  • Limpie la jaula, los platos y la caja de arena de su hurón con regularidad.
  • Si debe hacer cambios en la dieta de su hurón, hágalos gradualmente.
  • Asegúrese de que cualquier lugar al que tenga acceso su hurón ha sido debidamente impermeabilizado para disminuir la probabilidad de que ingiera un cuerpo extraño.
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