La fibra es un nutriente vital en la nutrición canina, y hay muchas formas de añadir fibra a la dieta de su perro. En los alimentos comerciales para perros, la fibra puede proceder de cereales como el arroz y el maíz, pero también de soja, pulpa de remolacha y cáscaras de cacahuete.
La fibra facilita la absorción de agua y da volumen a las heces, ayudando a mantener los intestinos de su perro regulares y las heces formadas y firmes. También favorece una buena salud intestinal al mantener los niveles de oxígeno intestinal inadecuados para las bacterias malas, impidiendo su crecimiento y colonización.
Fibra soluble frente a insoluble
La fibra sólo procede de ingredientes de origen vegetal y puede ser soluble o insoluble. La fibra soluble puede absorber agua y ser descompuesta y utilizada por el organismo, mientras que la insoluble no puede digerirse. Si a un perro se le da demasiada fibra soluble, o si se le introduce en ella demasiado deprisa, puede sufrir flatulencias o diarrea.
La fibra insoluble, aunque no es digerible, puede ser beneficiosa porque ayuda a regular el tiempo de tránsito en el intestino. Esto significa que la fibra insoluble puede aumentar el tiempo de tránsito en épocas de estreñimiento y disminuirlo en épocas de diarrea. Sin embargo, un exceso de fibra insoluble puede dificultar la absorción de otros nutrientes vitales y provocar pérdida de peso, mal pelo, vómitos y diarrea.
Necesidades de fibra en perros jóvenes, adultos y senior
Todos los alimentos comerciales para perros deben incluir una declaración de la AAFCO (Association of American Feed Control Officials). Esta declaración indica si el alimento ha sido formulado, lo que significa que la empresa ha añadido ingredientes para satisfacer los nutrientes necesarios para los perros, o si ha sido sometido a ensayos de alimentación animal para garantizar que los nutrientes son realmente digeribles y utilizables. La declaración de la AAFCO también especifica la etapa de la vida a la que se destina el alimento. Actualmente, la AAFCO sólo reconoce dos etapas de la vida: mantenimiento del adulto y crecimiento/reproducción. Si un alimento está etiquetado para «todas las etapas de la vida», cumple los requisitos más estrictos de crecimiento/reproducción, lo que no tiene en cuenta las necesidades de los perros senior.
A medida que los perros envejecen, suelen necesitar menos proteínas y más fibra en su dieta. Sin embargo, dado que no existe una etapa vital reconocida para los perros senior, los alimentos comerciales para perros pueden no satisfacer estas necesidades. Por eso es importante considerar la suplementación con fibra para los perros senior, sobre todo si desarrollan problemas gastrointestinales crónicos. Una cantidad adecuada de fibra puede ayudar a su cachorro mayor a mantener su salud digestiva y su bienestar general.
La fibra es un nutriente vital en la nutrición canina, y hay muchas formas de añadir fibra a la dieta de su perro. En los alimentos comerciales para perros, la fibra puede proceder de cereales como el arroz y el maíz, pero también de soja, pulpa de remolacha y cáscaras de cacahuete.
La fibra facilita la absorción de agua y da volumen a las heces, ayudando a mantener los intestinos de su perro regulares y las heces formadas y firmes. También favorece una buena salud intestinal al mantener los niveles de oxígeno intestinal inadecuados para las bacterias malas, impidiendo su crecimiento y colonización.
Fibra soluble frente a insoluble
La fibra sólo procede de ingredientes de origen vegetal y puede ser soluble o insoluble. La fibra soluble puede absorber agua y ser descompuesta y utilizada por el organismo, mientras que la insoluble no puede digerirse. Si a un perro se le da demasiada fibra soluble, o si se le introduce en ella demasiado deprisa, puede sufrir flatulencias o diarrea.
La fibra insoluble, aunque no es digerible, puede ser beneficiosa porque ayuda a regular el tiempo de tránsito en el intestino. Esto significa que la fibra insoluble puede aumentar el tiempo de tránsito en épocas de estreñimiento y disminuirlo en épocas de diarrea. Sin embargo, un exceso de fibra insoluble puede dificultar la absorción de otros nutrientes vitales y provocar pérdida de peso, mal pelo, vómitos y diarrea.
Necesidades de fibra en perros jóvenes, adultos y senior
Todos los alimentos comerciales para perros deben incluir una declaración de la AAFCO (Association of American Feed Control Officials). Esta declaración indica si el alimento ha sido formulado, lo que significa que la empresa ha añadido ingredientes para satisfacer los nutrientes necesarios para los perros, o si ha sido sometido a ensayos de alimentación animal para garantizar que los nutrientes son realmente digeribles y utilizables. La declaración de la AAFCO también especifica la etapa de la vida a la que se destina el alimento. Actualmente, la AAFCO sólo reconoce dos etapas de la vida: mantenimiento del adulto y crecimiento/reproducción. Si un alimento está etiquetado para «todas las etapas de la vida», cumple los requisitos más estrictos de crecimiento/reproducción, lo que no tiene en cuenta las necesidades de los perros senior.
A medida que los perros envejecen, suelen necesitar menos proteínas y más fibra en su dieta. Sin embargo, dado que no existe una etapa vital reconocida para los perros senior, los alimentos comerciales para perros pueden no satisfacer estas necesidades. Por eso es importante considerar la suplementación con fibra para los perros senior, sobre todo si desarrollan problemas gastrointestinales crónicos. Una cantidad adecuada de fibra puede ayudar a su cachorro mayor a mantener su salud digestiva y su bienestar general.
Las mejores y más saludables formas de añadir fibra a la dieta de su perro
La forma más fácil de aumentar la ingesta de fibra de su perro es añadir alimentos ricos en fibra a sus comidas. Éstas son algunas de las mejores opciones, incluida la cantidad que debe dar a su perro.
Calabaza
El alimento que más se consume es la calabaza, que puede adquirirse fácilmente en lata. Los perros pequeños sólo necesitan una cucharada sopera, mientras que los grandes pueden necesitar hasta un cuarto de taza. Como ocurre con cualquier cambio de dieta en los perros, se recomienda empezar poco a poco, de modo que si tiene una raza grande o gigante, empiece con una cantidad menor de calabaza y vaya aumentando poco a poco hasta llegar a un cuarto de taza.
Judías verdes
Las judías verdes son otro alimento integral que puede ser una gran fuente de fibra. Las judías verdes crudas son menos digeribles, pero pueden cocerse al vapor para facilitar la digestión. Obviamente, asegúrese de que estén suficientemente frías antes de dárselas a su perro. Otra opción son las judías verdes congeladas. Al igual que con la calabaza, los perros de razas pequeñas sólo necesitan una cucharada sopera (puede trocearlas para medirlas más fácilmente), mientras que los de razas grandes pueden tomar un cuarto de taza.
