El aceite de oliva tiene una variedad de beneficios para la salud de los seres humanos, y muchos de ellos también son aplicables a nuestros amigos de cuatro patas. Estos van desde estimular el sistema inmunológico hasta mejorar la condición del pelaje y la piel. Aunque siempre es importante controlar la ingesta calórica de su mascota, podría valer la pena agregar aceite de oliva a la dieta de su mascota con moderación.
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Beneficios para la salud del aceite de oliva para perros
Entre los muchos beneficios del aceite de oliva para los perros (y los seres humanos) se encuentran el hecho de que es rico en fitonutrientes, así como en vitamina E y ácidos grasos omega-3. Puede ayudar a mantener la piel de Fido hidratada y promover un pelaje brillante. Sin embargo, eso no significa que sea necesariamente una buena idea aplicar aceite de oliva directamente en el pelaje de su perro; es demasiado tentador para la mayoría de los perros, ya que solo querrán lamerlo.
Aquí hay algunos otros beneficios de incorporar aceite de oliva en la dieta de su cachorro.
Apetito mejorado
Si su perro se ha resistido a comer croquetas últimamente, un chorrito de aceite de oliva debería ser suficiente para cambiar el sabor y la consistencia de su comida diaria y podría ser todo lo que necesita para reactivar el apetito de su cachorro.
Por supuesto, si su perro no ha comido durante más de un día o tiene otros síntomas o comportamientos preocupantes, siempre debe buscar el consejo de su veterinario.
La prevención de enfermedades
Todos queremos mantener a nuestras queridas mascotas con nosotros el mayor tiempo posible, y ofrecerle a su perro una pequeña cantidad de aceite de oliva con regularidad puede ayudar a lograrlo. Los estudios sugieren que los antioxidantes como la vitamina E pueden ayudar a proteger las membranas celulares de su perro del daño causado por los radicales libres. 1 También podría prevenir la oxidación excesiva en las células, un proceso que conduce al daño tisular, así como a enfermedades más graves como la demencia y las enfermedades cardiovasculares.
El consumo de aceite de oliva también se ha relacionado con niveles más bajos de colesterol y la prevención del deterioro cognitivo.
Una pequeña dosis de aceite de oliva puede ayudar a mejorar la circulación y la respiración de su perro, e incluso ayudar a prevenir afecciones respiratorias como el asma. Como tal, las razas braquicefálicas (piense en bulldogs y Shih Tzus) podrían beneficiarse de una pequeña cantidad de aceite de oliva en su dieta de forma regular.
Mejor salud digestiva
Dado que actúa como un laxante, pequeñas cantidades de aceite de oliva también pueden ayudar a estimular el sistema digestivo de su mascota si sufre de estreñimiento o indigestión. Solo asegúrese de introducir con moderación y retirar el aceite de oliva si su perro desarrolla diarrea, vómitos o cualquier otro síntoma gastrointestinal.
Posibles peligros del aceite de oliva para perros
Aunque puede tener beneficios para los perros, el aceite de oliva es muy rico en grasas. Esto significa que siempre existe el riesgo de aumento de peso si su perro consume demasiado de forma regular.
Deberá asegurarse de no ofrecer aceite de oliva a su mascota si ya tiene un problema de peso y, como siempre, asegúrese de consultar a su veterinario antes de agregar aceite, o cualquier otro «alimento para personas», a la dieta de su perro.
Si tu perro consume una gran cantidad de aceite de oliva, quizás si se derrama una botella en el suelo o si no la estás añadiendo a su dieta con suficiente moderación, tendrás que estar atento a que le cause malestar estomacal y posiblemente diarrea. El consumo de demasiados alimentos grasos también puede provocar una afección potencialmente grave llamada pancreatitis.
Cómo ofrecer aceite de oliva a tu perro
La moderación es la clave, y cualquier adición de aceite de oliva debe introducirse gradualmente y en cantidades muy pequeñas (una o dos cucharaditas como máximo) a diario.
La mejor y más fácil forma de incorporar aceite de oliva en la dieta de su perro es agregar aproximadamente una cucharadita (que es apropiada para un perro de tamaño mediano, de 30 a 40 libras) a una comida.
El aceite de oliva se puede ofrecer semanalmente o, con la aprobación de su veterinario, incluso todos los días. Una raza más grande debería poder tolerar hasta una porción diaria del tamaño de una cucharada. Es mejor comenzar con una cantidad menor para asegurarse de que su perro no tenga una mala reacción y permitir que su sistema se acostumbre a este nuevo ingrediente.
Al elegir un aceite de oliva para su perro, generalmente es una buena idea optar por aceite de oliva virgen extra, ya que es más bajo en acidez.
El aceite de oliva también se puede cambiar por aceite de pescado o aceite de coco, que también pueden ofrecer una variedad de beneficios para la salud de su perro.
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