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Luxación rotuliana en perros

La luxación rotuliana es un problema común, sobre todo en perros pequeños, que puede causar problemas como daños en el cartílago, inflamación, dolor e incluso roturas de ligamentos. Reconocer los signos de la luxación rotuliana y buscar tratamiento puede ayudar a prevenir daños mayores en las rodillas de su perro y ayudarle a llevar una vida feliz y activa.

¿Qué es la luxación rotuliana?

La luxación rotuliana es una afección en la que la rótula de un perro se sale de la ranura en la que está diseñada para permanecer. El fémur, que es el hueso grande de la parte superior de la pierna, tiene un surco en el centro en el que se asientan la rótula y sus ligamentos asociados. Con la luxación rotuliana, la rótula se sale de este surco en el hueso de la pata, a menudo porque el surco es menos profundo de lo que debería ser. Este problema puede ser evidente en cachorros de tan sólo ocho semanas.1

A veces, la rótula se sale y vuelve a entrar en el surco; en otros casos, se queda fuera. Las luxaciones pueden producirse en sentido medial (hacia el interior de la rodilla) o lateral (hacia el exterior de la rodilla) y en una o ambas patas.

Síntomas de la luxación rotuliana en perros

Un perro con luxación rotuliana suele levantar la pata trasera afectada al caminar. Esto puede ocurrir durante unas pocas zancadas, tras las cuales utilizan la pata con normalidad.2 Otros síntomas incluyen:

Síntomas

  • Pierna flexionada en un ángulo inusual
  • La rótula se mueve libremente hacia delante y hacia atrás al tocarla
  • El perro se lame la rodilla
  • Cojera
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Un perro puede tener una rótula inusualmente móvil sin signos evidentes de dolor si la luxación empezó hace poco o el perro es muy joven. Los signos de dolor -cojera y lamido incesante- suelen aparecer después de que la afección haya progresado durante meses o años y causado daños en los tejidos circundantes.

La luxación rotuliana puede observarse en cachorros muy jóvenes, pero a veces no se manifiesta hasta una edad más avanzada,

¿Qué causa la luxación rotuliana en los perros?

Existen dos causas de luxación rotuliana, cualquiera de las cuales puede volverse sintomática en cualquier momento de la vida del perro, dependiendo de la gravedad:1 El defecto anatómico congénito es la causa más común. También puede deberse a un traumatismo, como una colisión automovilística o una caída.

¿Cómo diagnostican los veterinarios la luxación rotuliana en perros?

Si sospecha que su perro sufre una luxación rotuliana, su veterinario le realizará un examen físico y radiografías para confirmar el diagnóstico.

La Fundación Ortopédica para los Animales (OFA) ha establecido un sistema de clasificación de la luxación rotuliana para describir el estadio y la gravedad de la afección, como se indica a continuación, que su veterinario utilizará para elaborar un plan de tratamiento:

  • Grado 1: La rótula puede desplazarse fuera del surco pero vuelve a salir fácilmente por sí misma. Esto es especialmente frecuente en razas pequeñas como los yorkshire terrier, los crestados chinos y los pomerania.
  • Grado 2: La rótula se sale del surco con frecuencia y puede hacer que el perro sostenga la pata afectada en alto en alguna ocasión, pero puede volver a colocarse fácilmente en el lugar correcto y el perro sigue caminando sobre ella con frecuencia. Dado que la rótula entra y sale del surco con tanta frecuencia, con el tiempo pueden producirse traumatismos en la rodilla.
  • Grado 3: La rótula está fuera del surco de la rodilla la mayor parte del tiempo y la tibia, uno de los huesos de la parte inferior de la pierna, está moderadamente torcida. El surco donde debería asentarse la rótula es muy poco profundo. Algunos perros pueden seguir utilizando la pata pero en una posición anormal.
  • Grado 4: La rótula está permanentemente fuera del surco de la rodilla y la tibia está severamente torcida. El surco donde debería asentarse la rótula es inexistente o incluso convexo en lugar de cóncavo. El perro suele mantener la pata en alto.1
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Cómo tratar la luxación rotuliana

Dependiendo de la gravedad de la luxación rotuliana, su veterinario puede recomendar que se realice una intervención quirúrgica para mantener la rótula en su lugar adecuado. Varios procedimientos quirúrgicos diferentes pueden lograr esto, con la mejor opción dependiendo de las características específicas del caso del perro.

Dado que las cirugías de rodilla son procedimientos mayores, los veterinarios pueden aconsejar un enfoque de espera para una luxación rotuliana de grado uno o incluso de grado dos leve. Si un perro con luxación rotuliana muestra signos de dolor, ha desarrollado la luxación debido a un traumatismo en la rodilla o tiene dificultades para caminar, es probable que deba someterse a una intervención quirúrgica para corregir el problema. En los casos más graves, la amputación puede ser la única opción, pero se trata de una necesidad poco frecuente.

Aunque la cirugía es, en última instancia, la única forma de corregir una luxación rotuliana, puede apoyar la salud de la rodilla de su perro mediante el uso de suplementos para las articulaciones. Los suplementos pueden ayudar a que el cartílago se mantenga sano y a disminuir la inflamación de las articulaciones. También pueden ser necesarios el alivio del dolor y otros tratamientos.

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Pronóstico de los perros con luxación rotuliana

Es posible que las luxaciones de bajo grado no requieran una intervención quirúrgica inmediata, pero es probable que se deterioren hasta el punto de hacer necesaria la cirugía en el futuro. La cirugía suele ser un tratamiento muy satisfactorio y ayuda a los perros a recuperar -o alcanzar- un estilo de vida activo.

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Cómo prevenir la luxación rotuliana

Aparte de hacer lo que pueda para evitar que se produzca un traumatismo importante, la única forma de evitar tener un perro con luxación rotuliana es consultar a la OFA cuando busque un criador. La OFA mantiene una base de datos de perros que han sido certificados como libres de luxación rotuliana.1

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