Los amantes de los gatos que quieren que sus gatos disfruten del aire fresco, el sol y el ambiente de los árboles, arbustos y plantas, a menudo se sienten culpables por confinar a sus gatos al interior. Ésta era la mentalidad de las generaciones anteriores: que los gatos eran criaturas libres e independientes y que no debían ser confinados. Que no pueden estar sanos, felices y activos si no se les permite experimentar todas las glorias del exterior.
Hoy en día, comprendemos los peligros de dejar que los gatos deambulen libremente, ya sea por experiencia personal, de oídas o a través de los medios de comunicación, incluido Internet. He aquí sólo algunos de los peligros al aire libre, aunque no es una lista exhaustiva.
- El riesgo de contraer enfermedades graves y potencialmente terminales, como el VIF, el FeLV
- El riesgo de infecciones parasitarias
- Lesiones y/o muerte por ataques de perros, otros gatos o depredadores
- Lesiones o muerte por vehículos
- «Secuestro de gatos» con fines lucrativos o personales
- Atrapamiento y eliminación por vecinos que odian a los gatos
- Riesgo de convertirse en víctima de crueldad animal
- Confiscación por parte de las autoridades de control animal
- Riesgo de ingerir plantas tóxicas y exposición a pesticidas
- Riesgo de que lesiones o enfermedades leves pasen desapercibidas y se conviertan en problemas más graves para cuando su gato vuelva a casa
- Riesgo de que su gato hiera o mate a la fauna local
Por otra parte, existen algunos compromisos seguros para ofrecer a su gato de interior lo mejor de ambos mundos, sin los peligros potenciales de la libertad de movimientos en el exterior.
Transportar a su gato
Gary Loewenthal, antiguo anfitrión del foro About Cats solía llevar a su gato Mike por el patio trasero de su casa, permitiéndole olisquear y explorar a su antojo. El olfato de Mike guiaba a Gary en sus paseos, y cada expedición al aire libre era un poco diferente de la anterior. Es mejor que estas exploraciones se limiten a un tiempo muy breve -10 ó 15 minutos-, ya que la mayoría de los gatos se volverán demasiado impacientes por saltar y explorar por su cuenta. Si está pensando en sacar a su gato al exterior, lo mejor sería intentarlo primero con él en un transportín seguro, como su bolsa de viaje o un cochecito para mascotas. Los ruidos imprevisibles u otras sorpresas pueden asustar incluso a los gatos más valientes cuando no están acostumbrados a estar en el exterior. Un gato asustado podría soltarse fácilmente y huir, o incluso arañarle o morderle sin querer en su pánico. Lo mejor sería dar tiempo a su gato para que se adapte a estas salidas antes de intentar estos pasos siguientes.
The Spruce / Meg MacDonald
Adiestramiento con correa
Algunos gatos pueden adiestrarse para llevar arnés y correa, utilizando un método gradual de adiestramiento. Al principio, muchos gatos se sentirán confinados por el peso adicional del arnés, y sus primeros intentos de caminar con correa parecerán más bien del tipo «escabullirse» o «arrastrarse por el vientre». Algunos gatos también pueden encontrar formas de zafarse del arnés o enredarse con la correa, por lo que es mejor practicar en interiores con sesiones cortas para determinar si su gato lo tolera. Con tiempo y paciencia por parte del adiestrador, algunos gatos disfrutarán paseando con correa.
Algunos gatos pueden preferir simplemente «tumbarse» al aire libre con la correa, como hace nuestro Jaspurr (en la foto de arriba), que es un principiante en «etiqueta de la correa». Aunque Jaspurr se encuentra en la fase de «caminar sobre el vientre», es posible que con el tiempo pase a caminar con nosotros. Todo es cuestión de tiempo y paciencia si su gato se muestra dispuesto a esta actividad.
Tenga en cuenta que atar a un gato al exterior con una correa no sustituye a la interacción y supervisión personales. Los gatos nunca deben quedarse solos con una correa o una extensión de cuerda atada a ellos. Existe demasiado peligro de que se enreden, con la posibilidad de estrangulamiento, así como altos riesgos de que se salgan de la correa y huyan.
Le recomendamos un arnés resistente o un saco de paseo, en lugar de un collar. Los collares pueden soltarse con demasiada facilidad, lo que ocurrirá con toda probabilidad en momentos de miedo, como cuando se encuentre con un perro o gato extraño en la calle, ruidos fuertes, vehículos en marcha rápida o incluso al acercarse a extraños. Intente también comprar una correa lo más ligera posible, acorde con la seguridad. El «arrastre» adicional de una correa voluminosa ralentizará la marcha de su gato.
Asegúrese de probar el «cociente correa» de su gato en el interior durante varios días antes de sacarlo al exterior. Una introducción lenta y sesiones cortas le proporcionarán el mejor cambio para conseguir que su gato se aclimate a esta idea y darán como resultado un gato con una experiencia interior-exterior segura y feliz. Si tras muchas sesiones en el interior con mucho refuerzo positivo (golosinas y juguetes) su gato no parece adaptarse o muestra signos de estrés o aversión al arnés, considere alguna de estas otras formas seguras de introducir a su gato en el exterior.
The Spruce / Meg MacDonald
Un transportín personal
Si decide que quiere convertir a su gato en un «gato viajero», le sugerimos que adquiera un transportín que sea cómodo y resistente para ofrecer a su gato un espacio seguro para observar el exterior. Nosotros compramos un transportín personal tipo chaleco, llamado «Pet Pocket 2», fabricado por Global Pet Products. Compramos la versión básica, con un «bolsillo» de malla negra que sujetaba cómodamente a nuestro gato de forma segura con un cordón de ajuste y un clip metálico que se engancha a su arnés. También existen muchos otros tipos de transportines en el mercado, así que asegúrese de elegir uno que proporcione a su gato espacio suficiente para tumbarse y darse la vuelta cómodamente. Puede que tenga que probar varios estilos diferentes para averiguar cuál se adapta mejor a su gato.
The Spruce / Meg MacDonald
Andador con ruedas o cochecito
El cochecito Kittywalk ofrece tanto una «jaula» de red de nylon resistente para que el gatito pueda disfrutar de la experiencia al aire libre como una sombrilla de lona resistente al agua para protegerse del sol. El Wheel Away se convierte en mochila, transportín para el coche y cama. Estos transportines tipo cochecito pueden ser una gran opción, ya que le permiten dar paseos más largos con su gato sin tener que cargar con él, y le mantiene las manos libres para otras cosas. Muchos gatos se sienten seguros si tienen algo de intimidad o espacio para esconderse, por lo que la sombra parcial puede darles una sensación de seguridad al aire libre.
Recintos exteriores
Para los gatos que prefieren «vagar libremente» (dentro de unos límites), los recintos exteriores son ideales. Pueden construirse desde cero, con planos propios o comprados, o montarse como recintos modulares. Un recinto para gatos en libertad requiere disponer de un espacio exterior privado donde construir una estructura permanente. Las ventajas son que da a los gatos total libertad para vagar y explorar dentro de un espacio seguro. Requerirá un mantenimiento continuo para garantizar que la estructura siga siendo sólida y que no se formen defectos con el tiempo que puedan causar lesiones o ser un lugar por el que los gatos puedan escapar.
Sus experiencias pueden variar con alguno o todos estos medios de proporcionar una experiencia exterior segura a sus gatos, pero creemos que aquí se le han dado suficientes alternativas para empezar.
