Es posible que haya oído hablar o haya visto Adaptil para perros en la consulta de su veterinario o en Internet, con la promesa de calma en un collar, y haya pensado: «¿Qué son y funcionan realmente?». La respuesta corta es que sí, pueden ayudar en diversas situaciones, pero puede que no sean suficientes para todos los perros. El estrés y la ansiedad pueden surgir por múltiples motivos en los perros; conocer a gente nueva, las tormentas eléctricas, quedarse solo o incluso el simple hecho de ser adoptado y entrar en un nuevo hogar puede ser una situación estresante para nuestros compañeros cachorros.
¿Qué es un collar Adaptil?
Los collares Adaptil son collares de feromonas que pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad de perros y cachorros. Suelen activarse con el calor corporal del perro y la mayoría pueden llevarse hasta 30 días antes de tener que cambiarlos.
¿Qué es una feromona?
Las feromonas son compuestos químicos que los animales producen de forma natural y liberan en el ambiente. Cuando la feromona es percibida por otro miembro de esa especie, desencadena una respuesta de comportamiento. Esencialmente, las feromonas son las palomas mensajeras silenciosas e instantáneas de la información. Dado que estos compuestos químicos son tan especializados, son únicos para cada especie. Las feromonas influyen en los comportamientos de diversas maneras dependiendo del tipo de feromona. Algunas feromonas señalan el estado reproductivo, dan una advertencia a los demás para que se mantengan alejados o incluso envían una señal de alarma. Las feromonas apaciguadoras son las feromonas «para sentirse bien» que se liberan poco después de que un animal dé a luz y ayudan a sus crías mientras crecen.
Adaptil, antes conocida como DAP (feromona apaciguadora canina) es una versión sintética de la feromona apaciguadora canina. Tras el parto, una perra segrega estos compuestos de feromonas alrededor de sus glándulas mamarias y es la forma que tiene la naturaleza de reconfortar a los cachorros. A pesar de las miradas tan abiertas que desprenden los perros, todos los cachorros nacen ciegos y sordos, ¡un comienzo duro! Durante las dos primeras semanas de su vida, los cachorros recién nacidos dependen exclusivamente del olfato y el tacto y, durante todo ese tiempo, la feromona apaciguadora ayuda a minimizar el estrés que experimentará el nuevo cachorro. Cuando un cachorro se aleja gateando de su madre y su camada puede aumentar su estrés y comienzan a vocalizar claramente: ¡un SOS cachorro! Cuando vuelven con sus compañeros de camada y su madre reciben la señal tranquilizadora a través de la feromona apaciguadora que les ayuda a volver a estar tranquilos y relajados.
¿Por qué utilizar un collar de feromonas?
El uso de un collar de feromonas proporciona a su perro un suministro constante de feromonas independientemente de la hora o el lugar. Los perros que tienen fobia al ruido, comúnmente tormentas eléctricas o fuegos artificiales, se benefician al estar rodeados de la feromona apaciguadora, ya que no siempre podemos prever cuándo se producirá una tormenta eléctrica o cuándo habrá fuegos artificiales. Algunos perros pueden sufrir cambios temporales, como ser internados, viajar o ser hospitalizados, que pueden causarles estrés involuntario. Durante estos periodos, el collar Adaptil puede añadir una capa de seguridad para ayudar a los perros a sobrellevar los cambios a los que puedan enfrentarse.
Los cachorros que acaban de empezar su vida con sus nuevas familias pueden beneficiarse especialmente. Aunque llevar un cachorro a casa es uno de los días más felices, puede ser todo un shock pasar de dejar a sus compañeros de camada y a su madre a tener una nueva familia, ¡todo en un solo día! Los cachorros que utilizaron Adaptil durante esa fase de transición dejaron de llorar por la noche un 66% más rápido y tenían un 75% menos de probabilidades de vocalizar durante el día en comparación con los cachorros que no utilizaron Adaptil. Sentirse seguros también ayuda a los cachorros a aprender mejor durante sus primeros meses en las clases de adiestramiento, preparándoles para ser adultos equilibrados.
Cada collar Adaptil es ajustable pero debe ajustarse bien a su perro. Para garantizar un ajuste adecuado, no debe haber más de dos dedos de ancho entre el collar y el cuello de su perro. El calor corporal del perro ayudará a difundir las feromonas en el aire a su alrededor.
Ventajas
- Los collares Adaptil son de venta libre y no tienen efectos secundarios conocidos
- Su uso es seguro como complemento de los medicamentos para el comportamiento que le hayan recetado a su perro
- El collar viene en tamaños pequeño y grande y también en un tamaño Junior para cachorros de menos de 35 libras
- Una vez colocado el collar ajustable, proporciona hasta 4 semanas de apoyo continuo con feromonas
- No huele y no interfiere con la prevención de pulgas y garrapatas
- Adaptil ha publicado múltiples estudios sobre su producto en revistas veterinarias que demuestran que existe un impacto estadístico positivo para los perros que llevan los collares
Los Contras:
- El collar debe sustituirse cada 4 semanas para proporcionar un suministro constante de feromonas
- El collar no es impermeable y debe quitarse para acicalar al perro o cuando vaya a estar en el agua. Puede ser un inconveniente si tiene un perro amante del agua.
- Los collares pueden tardar hasta 7 días en ver resultados si se utilizan solos.
- Utilizado solo sin ninguna otra modificación del comportamiento y/o cambios ambientales, puede no ser eficaz para su perro
A fin de cuentas, los collares de feromonas pueden ayudar a su cachorro y desde luego no le harán daño. Sin embargo, la forma más eficaz de abordar cualquier situación que suponga un reto para su perro es la resolución del problema desde distintos ángulos. El manejo, la modificación del comportamiento y la modificación del entorno son cruciales para tener éxito en cualquier área en la que su perro se sienta ansioso o estresado. La modificación del comportamiento es un enfoque sistemático para cambiar el comportamiento mediante el uso de técnicas de aprendizaje como el condicionamiento operante y clásico. La modificación y gestión del entorno es algo que todo el mundo es capaz de hacer y los cambios pequeños y estratégicos pueden tener grandes repercusiones. Para las ocasiones en las que no podemos eliminar un obstáculo, podemos modificar el entorno de nuestro perro y minimizar el impacto estresante o ansioso. Por ejemplo, durante las fiestas en las que se van a lanzar fuegos artificiales, asegúrese de que su perro tiene un entorno cómodo. Tenga a mano ropa de cama suave, sus juguetes favoritos, tal vez una golosina congelada y ponga música clásica (¡sí, se ha estudiado y demostrado que ayuda!) con las cortinas echadas para minimizar los fuegos artificiales visuales. Mientras las festividades tienen lugar en el exterior, puede trabajar para que el interior sea lo más cómodo y relajado posible.
Como siempre, nunca deje de abogar por su perro ante su veterinario. Los veterinarios dedican sus días a asegurarse de que nuestras mascotas puedan mantenerse felices y sanas el mayor número de años posible, lo que incluye asegurarse de que se atiende a su bienestar mental. Los profesionales veterinarios, los conductistas veterinarios y los adiestradores certificados en refuerzo positivo pueden ayudarle a enseñar a su cachorro habilidades para que tenga más confianza y se sienta más seguro en diversas situaciones. Como la mayoría de las cosas en la vida, lento y constante se gana la carrera de los cambios positivos.
