Los bozales en los perros suelen suscitar reacciones molestas. Pero hay ciertas situaciones para determinadas razas de perro y sus propietarios en las que un bozal puede ser la mejor opción, por ejemplo, cuando se controla la agresividad o un historial de mordeduras.
Siempre que disponga del bozal adecuado para su perro, guiado por su veterinario, un bozal podría ser una opción práctica. He aquí las formas adecuadas de aplicar un bozal en el cuidado de su perro.
¿Por qué podría llevar bozal un perro?
Historial de comportamiento agresivo
Si un perro tiene antecedentes de agresividad, con otros perros o con personas, el uso de un bozal canasta como herramienta de manejo puede minimizar el riesgo en determinadas situaciones.
Algunos perros pueden necesitar ir siempre con bozal, pero puede ser posible enseñar a su perro a ofrecer un comportamiento alternativo más deseable y ayudarle a sentirse más relajado y seguro, a menudo con el apoyo de un conductista canino cualificado. Es vital comprender los riesgos y el uso adecuado de los bozales antes de echar mano de uno.
En situaciones repentinas de miedo/dolor
Algunos perros no suelen ser agresivos, pero si se encuentran en una situación muy incómoda y se ignoran sus señales de advertencia (a menudo en el veterinario o la peluquería), pueden sentir que no tienen más remedio que chasquear o morder. Si su perro siente dolor, puede reaccionar de un modo fuera de lo normal. Si han sufrido una herida grave, puede ser necesario ponerles un bozal mientras los traslada.
Legislación específica sobre razas (BSL)
Lamentablemente, algunos estados tienen una legislación que obliga a llevar bozal a determinadas razas cuando se encuentran en lugares públicos. Aunque la BSL no proporciona una solución para el verdadero problema de la tenencia irresponsable de perros y es discriminatoria hacia perros que a menudo son extremadamente mansos, para evitar que su perro sea incautado, deben seguirse estas normas.
Gran afán de presa
Algunos perros, como el galgo español, tienen un instinto de presa elevado y, aunque es mejor no tenerlos sin correa donde podrían dar caza, pueden intentar arrebatar animales más pequeños incluso cuando llevan correa, y un bozal podría evitar lesiones o la muerte.
Carroñeros
Algunos perros son notorios carroñeros durante los paseos, y pueden acabar con graves trastornos gástricos u obstrucciones. Aunque un bozal no es una solución infalible, puede ayudar a minimizar lo que su perro pueda ingerir. También se recomienda trabajar con órdenes firmes de «déjelo» y «suéltelo».
Viajar en transporte público
En algunos países y en determinados medios de transporte público, los perros pueden viajar, pero sólo si llevan bozal.
¿Qué bozal es mejor?
Existe una gran variedad de bozales en el mercado. Muchos favorecen la estética frente a la practicidad, y es crucial que elija un bozal bien ajustado que permita a su perro jadear libremente, tomar golosinas y beber agua. Asimismo, déjese aconsejar por su veterinario siempre que sea posible.
Bozal de cesta
El bozal canasta, es generalmente la mejor opción, pero la gente se aleja de él ya que tiende a ser el más notable. Un bozal canasta bien ajustado es eficaz a la vez que permite a su perro jadear con facilidad.
Bozal de malla
Este bozal de estilo más suave, aunque popular, dificulta el jadeo de los perros y sólo debe utilizarse durante breves periodos de tiempo. Este tipo de bozal tiene un ajuste apretado que no permite un jadeo adecuado, por lo que los perros corren el riesgo de sobrecalentarse e incluso de sufrir problemas respiratorios si se utiliza de forma incorrecta. Aunque está bien utilizarlo para sesiones cortas en el veterinario o la peluquería, no es adecuado para paseos o periodos prolongados. Este bozal no debe dejarse a los perros en jaulas o cajones, ya que puede resultarles estresante no poder jadear o expresarse. Además, estos bozales nunca deben «tapar» las fosas nasales del perro o corre el riesgo de que no pueda respirar.
Bozales específicos para cada raza
Los bozales para lebreles se utilizan habitualmente para razas como los galgos y los whippets, con hocicos largos y finos.
Puede ser difícil encontrar un bozal que se ajuste bien a las razas de cara chata y braquicéfalos como los Bulldog Francés y los Pugs, y además existe un mayor riesgo de que se sobrecalienten con uno.
¿Cuándo no es el bozal la mejor solución?
A veces, los bozales se utilizan por razones equivocadas. Un uso inadecuado puede causar dolor o incomodidad, estrés y ansiedad, y dificultad para respirar. Esto puede llevar a comportamientos problemáticos alternativos. Los bozales sólo deben utilizarse bajo la supervisión de un adiestrador canino cualificado o un profesional veterinario.
Como castigo
Si no se ha introducido adecuadamente a un perro en el uso del bozal, puede ser una experiencia aterradora -incluso traumatizante-. Algunos propietarios lo utilizan como forma de castigo por un comportamiento no deseado. Por lo general, el perro no asociará ambas cosas, por lo que no resulta eficaz a largo plazo. También puede erosionar el vínculo de confianza entre ustedes y podría provocar que se asusten cuando aparezca el bozal.
Para que deje de ladrar
Los bozales se utilizan a veces para intentar que el perro deje de ladrar, pero ésta es una forma inadecuada de utilizar un bozal. Aunque esto puede funcionar temporalmente (si el perro está aterrorizado por el bozal), el perro puede seguir ladrando cuando lleva uno, a menos que esté demasiado apretado. Es mucho mejor trabajar con un adiestrador y utilizar métodos de adiestramiento positivo con su perro.
Para detener un comportamiento destructivo
Si su perro ha estado mordisqueando objetos domésticos, un bozal puede parecer una buena solución. Sin embargo, no es buena idea dejarle el bozal puesto durante periodos prolongados, sobre todo cuando no está supervisado, y no está abordando el problema subyacente. Debe establecer por qué su perro está siendo destructivo y trabajar para resolverlo. Quizá se aburre y necesita más estímulos, o podría estar estresado como consecuencia de la ansiedad por separación.
Cómo adiestrar a su perro para que acepte un bozal
Empiece siempre ofreciendo una golosina sabrosa cada vez que ponga el bozal a la vista de su perro. Quiere que lo asocie con cosas buenas. A continuación, póngalo en el suelo y recompense a su perro cada vez que se mueva voluntariamente hacia él, hasta que lo toque activamente.
A continuación, anímele a meter el hocico en el bozal durante un segundo. Nunca fuerce el hocico. Aumente gradualmente el tiempo que tiene el hocico dentro. Al principio, puede utilizar una golosina o mantequilla de cacahuete apta para perros en el interior del bozal. Una vez que estén relajados con esta etapa, pase a sujetárselo alrededor de las orejas. El tiempo que esté sujeto debe aumentarse a lo largo de varias sesiones.
Introduzca siempre las sesiones de adiestramiento en un entorno poco estresante y familiar, y asegúrese de que las sesiones de adiestramiento sean breves (cinco minutos como máximo), utilice recompensas de gran valor y no intente ir demasiado rápido ni saltarse ningún paso.
