Llamadas así por las manchas oscuras de su lomo, las ranas leopardo o de los prados son pequeñas ranas semiacuáticas; existen más de 20 especies. Son fascinantes de observar pero no les gusta que las manipulen. Las ranas leopardo son excelentes mascotas para los propietarios de ranas inexpertos. Todas las especies de ranas leopardo son relativamente fáciles de cuidar, aunque requieren un mantenimiento regular de la jaula de al menos dos horas a la semana.
La variedad más común mantenida como mascota es la rana leopardo septentrional, de color verde brillante con manchas marrones. La rana leopardo del sur es otra especie común como mascota, de color verde oliva o marrón claro con manchas oscuras. La rana leopardo de las llanuras o rana leopardo de Blair es marrón con manchas oscuras, aunque es raro encontrarla como mascota. Su hábitat nativo se extiende desde las zonas templadas y subtropicales de Norteamérica hasta el norte de México.
Descripción de la especie
Nombre común: Rana leopardo, rana leopardo del norte, rana leopardo del sur, rana leopardo de las llanuras, rana leopardo de Blair, rana de los prados
Nombre científico: Lithobates o género Rana
Tamaño adulto: de 3 a 5 pulgadas de largo
Esperanza de vida: de 2 a 5 años, según la especie
Comportamiento y temperamento de la rana leopardo
Estas simpáticas ranas salen a veces durante el día pero son principalmente nocturnas. Aunque pueden intentar comer cualquier cosa que puedan tragar (lo que también incluye a otras ranas), su dieta principal consiste en insectos. Son algo tímidas y no les gusta mucho que las cojan en brazos, escondiéndose bajo el agua cuando se sienten amenazadas.
Son inofensivas para los humanos y no producen toxinas. Sin embargo, como todos los reptiles y anfibios, pueden tener salmonela, una bacteria dañina para las personas.1 Utilice guantes para manipularlos y lávese bien las manos. Esté preparado para sacarlas y meterlas en su jaula al menos una vez a la semana para limpiarlas.
Tenga en cuenta que estas ranas pueden saltar hasta 1 metro gracias a sus poderosas patas traseras. Las ranas domesticadas no son tan propensas a saltar, pero si se sienten amenazadas pueden intentar alejarse de un salto.
Alojamiento de la rana leopardo
Un acuario de 10 a 20 galones es suficiente para una sola rana leopardo, pero si mantiene más de una, aumente el acuario en 10 galones por rana. Para esta especie de rana, el espacio de suelo es más importante que la altura. Las ranas leopardo son semiacuáticas y necesitan tanto superficie terrestre como agua suficiente para sumergir sus cuerpos.
Un acuario mitad tierra, mitad agua es una opción excelente para las ranas leopardo. Puede separar el tanque en zonas con plexiglás. Puede colocar un trozo grueso de madera, como madera flotante, en parte en el agua y en parte en tierra para proporcionar una transición suave del agua a la tierra. Este trozo de madera también puede servir como lugar adecuado para tomar el sol. Alternativamente, puede apilarse grava lisa o rocas planas en el lado acuático para proporcionar una rampa de salida del agua. La grava lisa tiene menos probabilidades de causar abrasiones y heridas en la piel e, idealmente, la grava debe ser lo suficientemente grande como para que las ranas pequeñas no puedan tragársela.
Si es posible, utilice un recipiente de agua extraíble por el lado del agua que sea fácil de poner y sacar para limpiarlo cada dos o tres días. Evite utilizar un filtro de agua; en su lugar, realice un cambio de agua del 50% con regularidad (al menos dos veces por semana, quizá más). Algunos expertos creen que las constantes vibraciones del agua procedentes de una bomba de filtración pueden provocar una sobrecarga sensorial en las ranas.
Cada dos semanas, deberá limpiar a fondo el recinto con agua caliente. No utilice jabón, ya que los restos de detergente pueden matar a las ranas. Retire y vuelva a colocar el sustrato y limpie las paredes y el fondo del acuario.
Calentar
El acuario debe mantenerse entre 70 y 75 grados F durante el día. Sin embargo, una bajada de temperatura por la noche es una buena idea, hasta unos 60 F (unos 16 C). Como estas criaturas son de sangre fría, necesitan regular su temperatura corporal interna. Lo hacen moviéndose en su jaula para enfriarse o calentarse. Proporcione un gradiente térmico o rango de temperaturas en la jaula. Puede hacerlo proporcionando un asoleadero o zona cálida que suba hasta 80 F en un extremo de la jaula. Utilice un emisor de calor cerámico, una luz de calor nocturna o una almohadilla térmica bajo el tanque para proporcionar una variante de temperatura.
Las ranas leopardo hibernan, por lo que en invierno se ralentizarán y pueden dejar de comer durante unos tres meses. Si es posible, enfríe el hábitat de 37 a 39 F durante los meses de invierno para imitar el entorno natural de la rana.
Luz
Como son principalmente nocturnas, la luz ultravioleta o UVB no es necesaria, aunque puede ser beneficiosa para proporcionar un ciclo día/noche y los rayos invisibles pueden ayudar a su rana a metabolizar el calcio. Algunos propietarios de ranas consideran que esta luz no es necesaria, pero no es perjudicial y probablemente sea útil para su rana.
Sólo asegúrese de que la rana no pueda saltar sobre la lámpara y asegúrese de que la tapa de malla esté bien sujeta. Evite que el recinto sea demasiado luminoso; puede hacer que sus ranas se escondan continuamente.
Humedad
El rango de humedad ideal para la jaula es del 50 al 70 por ciento. Si su rana necesita más humedad, puede sumergirse en el agua. Un higrómetro o medidor de humedad le ayudará a comprobar los niveles de humedad. Utilice una botella pulverizadora para rociar la jaula con agua declorada varias veces al día, o puede automatizarlo con un rociador o nebulizador electrónico que utilice sensores o un temporizador.
Sustrato
El sustrato es el lecho o revestimiento del fondo de la jaula de su mascota. Puede utilizar tierra orgánica para macetas o una combinación de tierra y musgo de turba con corteza de reptil y musgo esfagno en la parte terrestre para que las ranas puedan excavar. La profundidad del sustrato en el lado terrestre debe ser de al menos 5 a 7 cm para permitir que las ranas puedan excavar.
Plantas de terrario
Proporcione plantas y piezas de madera para trepar, esconderse y asolearse. Cuando seleccione plantas para la jaula de su rana, consiga plantas que prosperen en un clima similar: temperatura en los 70 F, alta humedad y poca luz. Asegúrese también de que las plantas que selecciona no son tóxicas para los anfibios. Sus mejores opciones serán los helechos de baja altura.
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Comida y agua
Alimente a las ranas leopardo con una variedad de invertebrados, como grillos, gusanos de cera, larvas de mosca y lombrices de tierra. Una comida de tres a cuatro grillos diarios es un buen punto de partida para las ranas más jóvenes, y los expertos recomiendan alimentar a las ranas maduras sólo cada dos días. La variedad parece ser esencial con las ranas.
Los grillos pueden constituir la mayor parte de su dieta, complementándola con una variedad de otros insectos, como cucarachas, moscas, polillas y gusanos. Las presas deben cargarse intestinalmente (alimentarse con alimentos nutritivos como frutas, verduras, comida para perros, comida para peces o fórmula de carga intestinal para grillos) antes de dárselas a la rana. Cada dos comidas, espolvoree los grillos con un polvo de calcio para reptiles.
Vigile la forma del cuerpo de su rana. Recuerde que la sobrealimentación es probablemente más problemática que la subalimentación.2 Las ranas son comedores oportunistas. Asegúrese de que su rana no se está poniendo demasiado redonda y, si es así, reduzca la frecuencia de la alimentación.
El agua utilizada en un acuario para ranas leopardo no debe contener cloro ni cloramina, que pueden añadirse al agua del grifo municipal.3 Para estar seguro, utilice un producto para mascotas fabricado para eliminar el cloro y la cloramina.
Problemas de salud comunes
Como muchas ranas en cautividad, las ranas leopardo de compañía son susceptibles a la enfermedad de las patas rojas, una infección parasitaria que puede causar el enrojecimiento de las patas. Los síntomas incluyen pereza y pérdida de interés por la comida o la actividad4.
Las ranas leopardo también son propensas a las infecciones fúngicas, que aparecen como inflamación o una sustancia de aspecto algodonoso en la piel.4
Estas afecciones son tratables pero requieren una visita a un veterinario especializado en animales exóticos.
Cómo elegir su rana leopardo
Los mejores lugares para comprar su rana leopardo serían un criador de renombre o una exposición de reptiles en la que a menudo también haya anfibios. Las tiendas de animales no suelen mantener las mejores prácticas de cría, ni disponen de mucha información sobre la fecha de nacimiento o el historial sanitario de su rana. Por término medio, tanto si adquiere la suya en una tienda de animales como si es de un criador, pueden costar entre 10 y 25 dólares; esto varía en función de la rareza de la especie.
Busque ranas de piel clara y ojos que no estén nublados. Aunque estas ranas no sean demasiado activas, no es motivo de preocupación; con frecuencia permanecen quietas para evitar a los depredadores o cuando se sienten nerviosas.
Especies similares a la rana leopardo
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