Las manchas de color marrón bajo los ojos son una de las quejas más frecuentes de los propietarios de perros en la clínica veterinaria. Las manchas de lágrimas se producen cuando el exceso de lágrimas sale de los ojos del perro y corre por su cara y los lados de la nariz. Aunque inofensivas en sí mismas, las manchas pueden resultar poco atractivas y muchos propietarios desean eliminarlas. En casos graves, es posible que el lagrimeo excesivo provoque irritación cutánea, infección y mal olor en la zona. A continuación le explicamos cómo prevenir y tratar las manchas de lágrimas en los perros.
Causas de las manchas lagrimales en los perros
El lagrimeo normal en los perros
Muchas razas de perros presentan de forma natural un lagrimeo excesivo. En realidad, este problema no es «normal», sino que puede ser algo que el perro sufra debido a su raza y a la anatomía de su cabeza. Por ejemplo, muchas razas «cabeza de manzana», como los chihuahuas, los shih tzus, los lhasa apso, los boston terrier, los carlinos y los caniches, tienen cuencas oculares que no son eficaces para drenar las lágrimas debido a la forma y el tamaño del ojo. En un ojo normal, las lágrimas producidas por las glándulas lagrimales del ojo drenarán fuera del ojo a través de los puntos nasolagrimales. Se trata de pequeños orificios en las esquinas del ojo que actúan como drenajes de las lágrimas. Las aberturas desembocan en un pequeño conducto tubular que proporciona una vía para que las lágrimas drenen en el conducto nasolagrimal del perro. Este conducto dirige las lágrimas hacia la parte posterior de la nariz y la boca del perro, donde son tragadas de forma inadvertida.
Muchos perros de las razas mencionadas suelen tener cuencas oculares poco profundas, lo que provoca que las lágrimas rebosen los párpados inferiores en lugar de drenar por el conducto nasolagrimal. La presencia de lágrimas en la cara provoca manchas visibles. No se trata de una afección médica y no tiene cura; es simplemente una función de la anatomía del perro. En estos casos, no existe tratamiento para el lagrimeo excesivo en sí.
Otros problemas también pueden provocar un lagrimeo excesivo en los perros. Entre ellos se incluyen el entropión, el pelo largo o mal colocado que actúa como mecha y arrastra las lágrimas del ojo a la cara, y los puntos y conductos nasolagrimales obstruidos o dañados. Para abrir las estructuras bloqueadas del ojo, su veterinario puede recomendar su lavado bajo anestesia general o quizá una corrección quirúrgica.
Lagrimeo anormal en perros
Al igual que en los humanos, los ojos de un perro producirán más lágrimas o lágrimas en exceso en respuesta a una irritación de cualquier tipo. Las lágrimas sirven para lubricar y proteger el ojo, así como para expulsar objetos extraños e irritantes. Debe sospechar de una irritación ocular si su perro no presenta habitualmente un lagrimeo excesivo y manchas, entrecierra los ojos, sólo tiene un ojo afectado, se frota el ojo, tiene secreciones de color amarillo en un ojo o presenta un ojo enrojecido. En estos casos, debe concertar una cita para su perro con su veterinario lo antes posible. Los ojos irritados son muy dolorosos, y también puede haber un problema ocular que ponga en peligro la visión. Las úlceras y lesiones corneales, la uveítis y las infecciones deberán tratarse y controlarse de forma agresiva.
Las alergias también pueden provocar ojos rojos e irritados en los perros. Normalmente, los alérgenos ambientales, como el polen, la hierba o la contaminación atmosférica, causan alergia ocular en los perros. Será necesario tratar la alergia mediante la eliminación de los alérgenos, baños o medicamentos antialérgicos. Si se consigue controlar la alergia del perro, el lagrimeo excesivo y las manchas resultantes deberían resolverse espontáneamente.
Si su perro sufre entropión (curvatura hacia dentro de los párpados) o pestañas ectópicas (pestañas mal colocadas que rozan la córnea), necesitará una corrección quirúrgica. Estos procedimientos son relativamente sencillos y probablemente los realice su veterinario de cabecera. Una vez que la inflamación haya remitido y el perro se haya recuperado totalmente de la cirugía, la mancha lagrimal debería resolverse.
Diagnóstico de las manchas lagrimales en perros
Si la mancha lagrimal es el resultado de un lagrimeo excesivo anormal, debe abordarse el problema subyacente. Su veterinario puede evaluar los ojos de su perro para determinar cuál es la causa del lagrimeo excesivo. Es probable que el diagnóstico requiera un examen oftalmológico exhaustivo, tinción con fluoresceína de la córnea y pruebas lagrimales de Schirmer. Una vez realizado un diagnóstico definitivo, el tratamiento o la cirugía adecuados deberían resolver el problema de tinción lagrimal.
Tratamiento
Si su veterinario sospecha que el conducto nasolagrimal puede estar obstruido, colocará a su perro bajo anestesia general y utilizará lavado y pequeños instrumentos quirúrgicos para eliminar la obstrucción. Este procedimiento también puede servir para ensanchar los conductos nasolagrimales estrechados a consecuencia de una irritación crónica, una infección o una lesión.
Si su perro presenta manchas lagrimales debido al derrame normal de sus lágrimas como consecuencia de su anatomía, el problema es más difícil de tratar. Un tratamiento eficaz consiste en la administración de dosis bajas de antibióticos de forma continuada. Aunque es eficaz para reducir las manchas lagrimales, por desgracia, este enfoque es peligroso, ya que puede dar lugar a graves bacterias resistentes a los antibióticos, por lo que no se recomienda.
Cómo prevenir las manchas lagrimales
En mi práctica, he tenido el mejor éxito con una combinación de buena higiene y probióticos. La zona bajo los ojos del perro y su cara deben limpiarse suavemente al menos a diario con un paño húmedo. Esto elimina las lágrimas y los restos acumulados en la cara del perro antes de que puedan producirse las manchas lagrimales. Puede aplicarse una pequeña cantidad de peróxido de hidrógeno en la zona manchada de lágrimas para blanquear la mancha del pelo. También es útil mantener el pelo de la cara y alrededor de los ojos lo más corto posible, para que las lágrimas y los restos no se queden atascados en el pelo. Su veterinario puede recomendarle un probiótico de alta calidad para su perro. Mi producto favorito para prevenir las manchas lagrimales es el probiótico Forti Flora de Purina.
